Si bien existe en el mercado una amplia variedad de productos para satisfacer los gustos de casi todo el público, la elección del material que se utilizará para el piso de una cocina siempre debe tener en cuenta una serie de factores relacionados con la estética y la resistencia, ya que es uno de los ambientes más transitados y usados de una casa.
Por tal motivo, es necesario considerar distintos aspectos, como la durabilidad del material, y los estilos y colores con que se presenta el mismo.
Durabilidad del material: Porque el piso de una cocina no sólo debe soportar el ir y venir de las personas, sino también el tránsito de muebles, y la caída de utensilios, líquidos o alimentos sólidos, fríos o calientes.
Estilos, colores y patrones del material: Todos importan a la hora de elegir un piso que ayude a crear sensaciones de amplitud en aquellas cocinas pequeñas, o que combine mejor con los colores y estilos de las paredes y los artefactos y muebles usados en el lugar.
Afortunadamente, y como ya se dijo anteriormente, existe en el mercado una amplia oferta de materiales para revestir el piso de una cocina, que pueden acomodarse a la capacidad presupuestaria de cada hogar y a los gustos estéticos de sus dueños:
Piso de Vinilo: Una de las opciones más populares es el vinilo, que puede adquirirse bajo la forma de baldosas o láminas (rollos), y que se ofrece en una gran variedad de colores y texturas, imitando incluso otros materiales más costosos, como madera, cerámica, mármol, etc.
Los pisos de vinilo también poseen una buena resistencia (no se deforman ni dañan por el calor ni el agua) y su colocación es sencilla, incluso se comercializan baldosas que son autohadesivas.
En esta clase de piso se debe tener cuidado de no arrastrar objetos pesados (heladeras, cocinas, etc.), por lo que se recomienda el uso de maderas contrachapadas como guías para mudar un mueble de un lado a otro de la sala. Para la limpieza, se aconseja no usar detergentes fuertes ni productos abrasivos.
Piso de Cerámica: Las baldosas de cerámica resultan otra opción atractiva para instalar en una cocina, gracias a que ofrece una mayor durabilidad y facilidad de limpieza. Son placas de poco grosor hechas a partir de composiciones de arcillas y otras materias inorgánicas sometidos a alta temperatura.
Este material se encuentra disponible en una amplia gama de colores, relieves y formas. Una de sus desventajas es que posee una baja resistencia al impacto.
Pisos para Cocina: La opción de la madera maciza
También existe la posibilidad de recurrir a la instalación de un piso de cocina hecho con madera maciza, un material mucho más resistente que los anteriores y que le da un aspecto más elegante al lugar.
Sin embargo, los precios de compra y colocación, sumados a un mantenimiento más exigente, hacen que la mayoría de los dueños de casa de incline por una de las dos alternativas anteriores.
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El piso flotante no es recomendable para la cocina por que mi idea es colocar piso flotante en el comedor y el mismo color en la cocina que es de concepto abierto.