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Taladros eléctricos y brocas: Clasificación y usos

El taladro eléctrico es una herramienta cuyo uso en los trabajos de construcción se ha tornado habitual, por lo que resulta conveniente conocer cuáles son los modelos más utilizados y qué tipo de medidas deben tomarse para su correcto empleo.

Tipos de Taladros Eléctricos

Básicamente, los taladros eléctricos se agrupan en tres categorías:

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Taladros eléctricos convencionales: Son los más conocidos y utilizados, y se clasifican en sistemas de rotación y sistemas de percusión o mixtos.

Los taladros percutores se caracterizan por ser los más versátiles, ya que permiten perforar madera, metal y hormigón. Se denomina percusión al golpeteo que acompaña a la perforación por rotación y es la que permite atravesar materiales muy duros. Esta función puede desactivarse cuando se trabaja con superficies de menor dureza, como la madera, el plástico o el yeso.

Taladros inalámbricos: Es una evolución del anterior que incluye una batería que permite su utilización sin conectar a una toma de corriente.

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Su principal ventaja es la libertad de movimiento, pero a su vez ofrecen una menor potencia en comparación con los modelos convencionales. Por ese motivo sirven para perforar superficies no muy duras y generalmente carecen de percusión.

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Taladros electroneumáticos: Son modelos con percutor de mayor potencia que los anteriores, debido a que utiliza más masa. Han sido diseñados para perforar materiales de muy alta dureza, como hormigón, roca, o espesores muy gruesos de material de obra.

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Este tipo de taladro ayuda a reducir el esfuerzo y tiempo de perforación, aunque resulta poco preciso cuando trabaja sobre materiales blandos.

Brocas

La broca es una pieza metálica de corte que crea orificios en diversos materiales cuando se coloca en un taladro.

Para realizar perforaciones correctamente y con seguridad, es importante utilizar la broca adecuada al material sobre el que se va a trabajar.

Para perforar piedra, ladrillo duros u hormigón: La mayoría posee puntas de carburo de tungsteno y requieren el uso de taladros percutores o electroneumáticos. Hay que tener en cuenta que las brocas para hormigón pueden ser utilizadas para perforar piedra, pero no al revés.

Para perforar paredes de materiales blandos: Se utilizan las brocas multiuso o universales, y sirven para taladrar madera, metal, plásticos y materiales de obra. En ese caso no se deben utilizar con percusión, dado que su vibración podría dañar los materiales o producir agujeros demasiado grandes.

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Casos especiales: Algunas superficies a perforar requieren un trabajo especial, y este es el caso de la cerámica, para la cual se debe utilizar una broca con punta de carburo.

Primero se marca el punto a perforar con un punzón metálico y se pinta con un rotulador, luego se cruza sobre dicho punto dos tiras de cinta transparente y se perfora ligeramente el punto marcado para iniciar el agujero. Para vitar que la broca resbale, es recomendable comenzar con poca velocidad (no más de 500 vueltas por minuto).

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Cuando se trabaja con cristal, se debe utilizar una broca especial para ese material. Antes de comenzar, se debe colocar una corona de masilla alrededor de la zona a perforar y se la rellena con vaselina o trementina para lubricar la broca.

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