Se identifica como termitas a aquellos insectos que, movidos por un apetito voraz por la celulosa, se han convertido en una plaga que puede provocar graves daños en las estructuras (incluidas vigas, techos, paredes y aberturas), muebles, obras de arte y otros productos de madera.
A esto se suma el hecho que puede resultar sumamente difícil descubrir tempranamente si una colonia de estos animales se ha instalado en una parte de la casa, debido principalmente a su pequeño tamaño y a que evitan la luz.
Por esta razón, sumada a que una sola colonia es capaz de albergar a alrededor de 3 millones de individuos, es importante tomar una serie de medidas que ayuden a prevenir una invasión de termitas.
En primer lugar, se debe tener en cuenta cuáles son los medios que ayudan a atraer a un enjambre de termitas:
Suelo: La mayoría de las termitas que atacan la madera viven bajo tierra y no en las estructuras que le sirven de alimento, como se piensa popularmente. Los insectos tienen la capacidad de cavar galerías a una profundidad cercana a los 90 centímetros, donde se alojan el rey y la reina de la colonia, lo que dificulta en gran medida su detección. Toda la tierra extraída durante la excavación también es aprovechada por estos insectos para armar conductos de barro que les permiten acceder a la madera presente en una construcción.
Estos túneles también les ayudan a infiltrarse a través de las juntas de hormigón y ladrillos. Incluso hay algunas especies capaces de desgranar estos materiales para crear sus galerías y de este modo atravesar los muros.
Madera: Las termitas se alimentan de la celulosa contenida en la madera y sus derivados, los que son degradados por la acción de los protozoos que habitan el sistema digestivo de esos insectos.
Agua: Además de la madera, otro elemento necesario para la supervivencia de la colonia es la humedad, bastando para ello que haya un grifo que gotea o filtraciones de agua en paredes, suelos y techos para convertirse en una fuente atractiva para las termitas.
Medidas para prevenir el ataque de termitas según el medio
Suelo:
- Si se tienen materiales de construcción y leña, es conveniente ponerlos lejos del suelo.
- Se pueden crear barreras entre la madera y las termitas mediante la instalación de losas gruesas de concreto y con mallas de metal de alta resistencia.
- Si se tiene un jardín junto a las paredes de la casa, se debe evitar la colocación de mantillo con restos de madera, ya que puede atraer termitas y que éstas terminen trasladándose a los muros.
- Hay que eliminar todos los árboles muertos, tocones o raíces antiguas. Todos ellos son fuentes de alimento que atraen a los insectos.
- Reparar la totalidad de las grietas y agujeros en paredes, cimientos y techos para evitar que las termitas ingresen fácilmente a la casa.
Madera:
- Se puede proteger la madera del ataque de las termitas utilizando materiales tratados con productos químicos, como un protector impregnante. En este caso se prepara las superficies lijándolas y limpiándolas, para luego aplicar una o dos capas de algún protector que penetre bien a través de las fibras de la madera.
- Otra técnica de prevención, de reciente desarrollo, consiste en modificar la pared celular de la madera mediante la aplicación de un shock térmico en condiciones variables de presión atmosférica, lo que hace que la madera dure mucho más y se hinche o merme mucho menos.
Agua:
- Debe hacerse un trabajo de revisión de la casa, con el fin de detectar las fugas y filtraciones de agua y repararlas.
- Eliminar todo punto de acumulación o estancamiento de agua que se encuentre cerca de la casa.
- Limpiar las canaletas y desagües de la vivienda, retirando los escombros u otros restos que impidan el normal discurrir del agua.
- Ventilar adecuadamente la casa para evitar la acumulación de humedad en rincones, sótanos y otros sitios.
