En algunos países se conoce como fibrofácil (Arg.) o Trupán (Chile), en otros por sus siglas en inglés: MDF. El «tablero de densidad media» (medium-density fireboard) es un elemento de gran utilidad en mobiliario y construcciones en general, y está hecho en base a madera de pino prensada a elevadas temperaturas y adherida con aditivos como cera o resina. Dado que no resiste la humedad, el fibrofácil necesita ser barnizado para resistir con buen ánimo y longevidad los embates del tiempo.
Las bondades del fibrofácil o MDF son varias y contrarrestan ampliamente su fragilidad ante la presencia de la humedad. Por empezar, es económico. Es posible hacer paneles divisorios en ámbitos laborales sin perder elegancia y sin grandes inversiones. Tiene buena acústica. Es sencillo para trabajarlo y con una buena barnizada, que es lo que nos ocupa en este post, se logran brillantes superficies en muebles, repisas, paneles, y artesanías.
Cómo barnizar el fibrofácil o MDF
Cada material a cubrir con barniz tiene sus secretos. En este caso, el MDF o fibrofácil tiene como particularidad el ser poroso y muy absorbente. Para homogeneizar la superficie, es preciso, como en toda ocasión que se quiera barnizar madera, lijar. Lijar suavemente, con grano fino, toda el área que cubriremos con barniz.
Una vez completado el lijado -incluyendo bordes- pasamos un cepillitos suave, que quite el polvillo, y un trapo limpio y apenas humedecido, para descartar toda pelusa posible. Ahora sí, nuestro objeto de MDF está listo para ser recubierto de barniz. Aclaramos que el procedimiento es idéntico si se quiere emplear pintura -esmalte, óleo, látex, etc.- o laca.
Barnizar el MDF o fibrofácil: acabado claro, acabado oscuro
La tonalidad depende de la cantidad de manos o capas que apliquemos. De cualquier manera, aún buscando tonalidades claras, son precisas al menos tres capas de barniz, debido a la ya mencionada gran porosidad que presenta esta textura. Para hacerlo, sirven los pinceles o rodillos, así como el barniz en aerosol.
Un detalle a tener en cuenta es que para trabajar con barnices son preferibles los días frescos, y los espacios alejados del sol. Esto evita que la cubierta seque demasiado rápido, dejando manchas sobre la madera.
Por otra parte, si lo que pretendemos es alcanzar un tono de madera oscura, es conveniente aplicarle al fibrofácil o MDF un sellador de pintura al agua, que selle los poros y permita que se luzca más el barniz. Atención: este sellador deja una leve huella en la superficie, por lo que no se recomienda en caso de buscar un acabado con transparencias.
Si realizo un cartel con el nombre para una casa de campo en mdf y lo coloco al exterior, con que lo puedo proteger sin modificar los colores utilizados en pintura en dicho cartel?