Utilizadas en la construcción desde tiempos antiguos, las tejas han servido principalmente para evitar las lluvias y para aportar un mayor valor estético, y tradicionalmente fueron hechas a partir de materiales disponibles a nivel local, como terracota o pizarra. En la actualidad, también se han introducido materiales modernos como el hormigón o el plástico.
Precisamente en este post se verá cuáles son las características y ventajas que presenta el uso de las tejas fabricadas a partir de polímeros plásticos de alta densidad en el revestimiento de los techos.
De apariencia similar a las de arcilla, las tejas plásticas se diferencian de aquellas por ser mucho más livianas, llegando a pesar menor del 10 por ciento de lo que pesan las de materiales clásicos. Asimismo, presentan mejor resistencia a la compresión, tolera las variaciones significativas de temperatura, brinda mejor soporte al tránsito de personas, y posee mayor resistencia a los ambientes salinos.
Debido a su bajo peso, el trabajo de instalación de esta clase de techo es más sencilla, permitiendo ahorrar la mitad del tiempo que se invertiría en un tejado de piezas de terracota u otro material tradicional. Asimismo, estas tejas pueden ser manipuladas con facilidad por una sola persona, requieren una estructura de soporte simple y no necesitan la instalación de una cubierta inferior.
Las tejas de plástico también se destacan por no demandar mucho mantenimiento, ya que la ausencia de poros ayuda a prevenir la acumulación de musgo y hongos, requiriendo sólo algunos lavados son agua y jabón. Además, por no necesitar mortero en su instalación, se encuentran libres de eflorescencias.
Tejas de plástico: Resistencia al granizo
Otra ventaja importante que ofrece un tejado hecho con piezas de material plástico se encuentra en su alta resistencia al granizo fuerte y su adaptabilidad a distintas condiciones ambientales, incluyendo los altos niveles de humedad que suelen afectar la integridad de las tejas de terracota o de otro material tradicional.
Además, las tejas de plástico ofrecen la posibilidad de reciclar enormes cantidades de desechos de polímero plástico de alta densidad que las ciudades generan en forma diaria y que incluyen bidones, carcasas de ordenadores y teléfonos móviles, tuberías, baldes,etc.
Este material viene de fábrica con diferentes opciones de color y acabado, lo que facilita su uso en distintos tipos de construcciones. Si la obra se encuentra en una zona muy expuesta a los rayos del sol, se puede utilizar tejas de plástico con tratamiento contra radiación ultravioleta para que conserven su color original por mucho más tiempo.