Pintar una pared, una puerta o un mueble puede ser una tarea sencilla si se tienen las herramientas adecuadas y los conocimientos básicos sobre las técnicas y el manejo de los materiales que se utilizan, pero no está demás tener presentes algunos trucos caseros bastante económicos que pueden ayudar a obtener un resultado final más limpio y satisfactorio.
Por ejemplo, si se desea obtener un acabado brillante que luzca realmente bien, se puede esperar a que la primera capa se seque por completo para luego pasar un papel de lija de grado 600 húmedo sobre la superficie. limpiando el exceso con una toalla de cocina. De este modo, la siguiente capa de pintura lucirá muy brillante, y el resultado será aún más espectacular si se hace lo mismo antes de aplicar una tercera mano de pintura.
Algunas veces, una superficie recién pintada puede tener un efecto visual agradable, aunque el olor que emana de la pintura aplicada podría no resultar tan atractivo. Para aquellos casos en que el aroma a pintura fresca resulte incómodo para los habitantes de la casa, existe la solución de cortar una cebolla por la mitad y colocarla en la habitación recién pintada para que absorba y neutralice el olor. También agregar unas pocas gotas de esencia de vainilla a la preparación de la pintura puede ayudar a atenuar en gran medida el aroma sin afectar su color.
Para pintar el marco de una ventana sin manchar los vidrios se suele utilizar cinta de papel de enmascarar: sin embargo, en muchos casos el material adhesivo puede dejar marcas en el cristal, obligando a un trabajo extra de limpieza que sólo puede hacerse una vez que la pintura haya secado completamente. Para evitar este inconveniente, se puede cortar papel de diario en tiras y humedecer cada una de ellas para usarlas como si se tratara de cinta de pintor. La humedad permite mantener las tiras pegadas al vidrio el tiempo suficiente para que se pueda pintar el marco tranquilamente. Una vez que el papel se seca completamente, caerá o podrá ser retirado sin dificultad.
Truco para que las puertas con pintura nueva no queden pegadas
Hablando de pintar aberturas, muchas veces se da el caso de que una puerta o ventana queda pegada al marco a pesar de que se ha dejado secar la pintura o el barniz por el tiempo indicado por el fabricante. Para no sufrir este percance, se puede tomar una vela y frotar con ella los bordes de la puerta o la ventana antes de proceder a cerrarla.
Finalmente, para aquellos pinceles viejos cuyas cerdas han endurecido por los restos de pintura mal limpiada, existe la posibilidad de «rejuvenecerlos» después de sumergirlos en vinagre caliente y peinarlos con un tenedor metálico, para luego dejar secar con las cerdas rodeadas con una banda elástica para que mantengan su forma.