Contratar un albañil puede convertirse en una tare sumamente difícil, ya que es una persona que juega un rol importantísimo en la construcción de la obra. Es quien presta su fuerza de trabajo para poder hacer realidad la edificación.
En este articulo vamos a develar todo lo que necesitas saber cuando surge la necesidad de contratar un albañil, en qué tareas puede ayudarte, cómo puedes pagarle, cuáles son los plazos… entre otras cosas.
El papel del albañil en la construcción
La construcción es una labor que se ejecuta de manera conjunta entre muchas personas especializadas. Por tanto, es importante contar con profesionales y trabajadores que sean capaces de llevar adelante el trabajo y otros que supervisen las `tareas para asegurar que todo se realiza conforme lo planeado.
El albañil debe ser experimentado y con los conocimientos necesarios para la tarea que va a realizar. Es de suma importancia contar con una persona de confianza, por eso hay que poner en marcha algunas recomendaciones clave:
El boca a boca
Cuando uno no conoce a un albañil, es útil consultar con gente del entorno cercano para obtener referencias. Hay que despejar todas las dudas que se puedan tener para tener la mayor seguridad y tranquilidad de que se trate de una persona capaz de llevar adelante el proyecto.
Tener en claro el presupuesto
Hay que determinar cuánto es lo máximo que se puede gastar en mano de obra, ya que como mínimo hay que pagar el sueldo a un albañil y a su ayudante.
En este punto sirve mucho consultar los costos con conocidos o preguntar directamente a un albañil.
La experiencia de la persona
Hay que tener bien en claro cuanta experiencia tiene el albañil antes de contratarlo, para saber si esta capacitado para realizar el trabajo que requerimos. Esto es esencial en caso de que surjan complicaciones, ya que debe ser capaz de solucionarlas.
Los materiales
Los materiales deben ser de buena calidad, esto influye claramente en el costo del proyecto, por tanto, hay que tener presente el presupuesto destinado a los mismos.
Formas de pago para un albañil
El método y forma de pago va a depender del tiempo que le tome realizar el trabajo, claramente no es lo mismo una tarea que lleva un día a otra que toma semanas.
Se paga a destajo cuando el obrero cobra según los avances de la obra. Al comienzo de la construcción ambas partes acuerdan un precio por el trabajo y el pago se va efectuando conforme el albañil va avanzando en su labor sin importar el tiempo que le dedique a cada tarea.
Es una forma de pago que se recomienda cuando se cuenta ya con todos los recursos para la obra, desde los materiales al dinero para pagarle a la persona.
Claro está que se requiere de supervisión del trabajo, para evitar que el obrero trabaje rápidamente sin cumplir con los criterios de calidad.
Pago semanal
En este caso ambas partes acuerdan una cantidad de dinero que se abona de forma semanal, cada viernes o sábado. Es un método que se usa cuando non se sabe a ciencia cierta cuando se va a terminar la obra o no hay certeza de si se va a contar con la totalidad del dinero para terminar el proyecto.
Es importante también supervisar para que se cumplan las metas de trabajo y no se extienda el mismo por mas tiempo del que debería.
Por metro cuadrado
Esta forma de pago se establece según el precio que da el obrero por metro lineal o cúbico, y se abona una vez que el trabajador lo termina. El pago se hace una vez por semana y el costo va a depender de los metros que el albañil haya avanzado.
La unidad de medida va a depender de lo que se haga, por ejemplo, si se realiza una pared es por metros cuadrados, mientras que si se trata de una excavación, por metros cúbicos.
No hay que dejar al trabajador sin supervisión, para evitar errores en los costos finales.
Por un trabajo en específico
Este valor lo da el albañil por el trabajo total antes de comenzar, y se abona una parte al inicio y el resto cuando culmina.
Es muy importante saber que nunca se debe abonar el total del trabajo antes de que el obrero haya terminado de hacerlo.
Fuente: Hipotecario seguros
