La cocina americana, se llama así porque el estilo se hizo muy popular en los Estados Unidos, no es una tendencia soplo para espacios reducidos, ahora incluso los hogares más grandes cuentan con ellas.
Esto se debe a que lo gourmet ha avanzado muchísimo, y este formato de cocina permite un mayor disfrute de las comidas la vez que hace posible el compartir el proceso de elaboración de los platos con el resto de las personas en la casa.
En una cocina americana el cocinero no está solo. La cocina integrada al living ayuda a que se disponga de una mayor superficie de reunión, además este estilo suele contar con una barra que permite a los invitados sentarse y ser partícipes durante todo momento.
Paralelamente a ello, esta barra hace también de desayunador y mesa, además de ofrecer una vista más limpia y abierta del ambiente.
Juntos pero separados
Cabe destacar que si bien la cocina americana no tiene una división del living, se busca la separación mediante herramientas simples como pisos diferentes o islas que separen de forma conceptual los ambientes.
La aireación en la cocina americana
Claramente que cuando se cocina se desprenden olores, y nadie quiere que los sillones se impregnen de aromas culinarios, por lo que es imperioso el contar con una campana con extractor lo suficientemente potente para extraer todos los olores y un filtro que capte las partículas de grasa que liberan los alimentos en la cocción.
Ventajas y desventajas de la cocina americana
Ventajas
- Maximiza el espacio y se aprovecha la luz de los ambientes.
- Ofrece armonía y uniformidad en los espacios.
- Es funcional y muy práctica.
- Ofrece la posibilidad de decoración en diversos estilos, ya sea rustico, nórdico, minimalista, etc.
Desventajas
Si no se cuenta con una buena campana con extractor, los olores de las comidas se impregnan en el salón.
Siempre hay que tener la cocina ordenada, sino el desorden queda a la vista.
El ruido durante las tareas en la cocina puede resultar molesto en el living.
Consideraciones a recordar en la cocina americana
Los electrodomésticos tienen que ser silenciosos.
La decoración de la cocina y del living si bien son distintas, tiene que ser armónicas y agradables a la vista.
La iluminación también tiene que ser funcional para los dos espacios, por lo que hay que cuidar el contraste entre ambos.
El orden es fundamental, ya que en este tipo de cocinas no se puede ocultar nada. Los platos sucios, ollas desparramadas, vasos por doquier… tienen que quedar en la historia.
Fuente: Homepedia
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